La cervecería Racibórz, que data de 1567 y está situada en la misma colina que el castillo de Piast, es una de las más antiguas de Polonia.
El cliente quería ampliar su producción empezando a envasar sus cervezas en latas de aluminio y botellas de vidrio no retornables. La distribución del espacio disponible para estas líneas era muy reducida, por lo que requería un planteamiento especial; por eso sugerimos una línea híbrida. Esto significaba tener algunos de los equipos comunes para ambas líneas de llenado (latas/vidrio): un despaletizador universal, luego dos llenadoras, y un inspector de nivel de llenado por rayos X, una cuchilla de aire y una etiquetadora lineal autoadhesiva, antes del envasado (que era suministrado por el cliente).
Al disponer de poco espacio, también diseñamos un gran pulmón en el nivel superior, antes de que las latas entren en el dispositivo de aclarado y volteo, y antes de que las botellas lleguen al transportador vertical. La línea está diseñada para alcanzar una capacidad de 6000 latas por hora o 3500 botellas por hora, ambas llenando cerveza en envases de 500 ml.
